Dentro de la gama de dolores de cabeza, podemos distinguir desde dolores pasajeros hasta los más agudos y severos. Sin embargo, son los últimos los que provocan más preocupación debido a la frecuencia con la que producen. Es entonces cuando estamos frente a una enfermedad crónica sin origen exacto, aunque sí se ha dicho que puede deberse en algunos casos a factores hereditarios. ¿Cómo se producen las jaquecas? Básicamente se trata de la extradilatación de vasos sanguinos intracraneales, a un nivel en que los nervios son comprimidos, produciéndose intensos dolores.
Comúnmente, estos dolores se producen en un sector de la cabeza de manera punzante y pulsátil, de manera de que se sienten latidos en la zona afectada. Pueden durar entre 4 y 72 horas y, mientras el dolor permanece, se recomienda no mantener actividad física ya que puede agravarlos. Lo importante es que, al detectarlas, se realicen exámenes médicos para poder detectar el origen de éstos y así poder ver de qué manera pueden aliviarse. De esta forma, es muy diferente una jaqueca producida por estrés, a otra por alguna reacción alimentaria.
Muchas veces, las jaquecas son “anunciadas” y es entonces cuando se debe mantener la calma y tener a mano los analgésicos adecuados para poder combatirlas lo antes posible. Una de las cosas que permite prevenirlas es el constante consumo de agua, el practicar ejercicio, el correcto descanso y evitar el tabaco y el alcohol.